Ni bien concluyó el partido entre Barcelona y los Red Bulls de Nueva York, irrumpieron en la escena varios espontáneos con prendas distintivas azulgranas para intentar abrazar o tomar una selfie con las figuras del club blaugrana. De hecho, el primer aficionado logró tocar a Gerard Piqué antes de ser reducido por un agente de seguridad de la organización. Acto seguido aparecieron unos cuantos más, inclusive con el torso desnudo, pero después de una intensa persecución fueron detenidos y expulsados del campo de juego de forma inmediata.
La Bola Sports registró las imágenes del preciso momento en que los espontáneos irrumpen en el verde, mientras los protagonistas de ambos equipos se congratulaban de forma recíproca.
Ohhhhh…..la emoción y la euforia ….fue más fuerte !!!….una pena !!!!….