El bicampeón de la Copa Libertadores parecía irse goleado en Belo Horizonte, pero reaccionó con autoridad para el emocionante 2-2 ante el ‘Galo’ mineiro. El ‘Verdao’ lleva 20 partidos sin perder de visita.
Nunca se puede dar por muerto al Palmeiras de Abel Ferreira, así esté en su peor noche y diera la impresión de estar al borde del colapso. El Atlético Mineiro fue superior durante 47′, pero no le dio el puntillazo final cuando el bicampeón de la Libertadores no reaccionaba. Y eso fue suficiente aliento para el ‘Verdao’ que con la casta que lo llevó a la cima de América dos años seguidos, se lo empató 2-2 en la última pelota del partido.
El ‘Galo’ fue amo y señor de los primeros 45’, hasta el punto de no dejar al Palmeiras pasar la mitad de la cancha. Después de 13 remates (nueve afuera, tres bloqueados, pero solo uno al arco), la recompensa le llegó al equipo dirigido por Cuca desde los 12 pasos. A los 46 de la primera fracción, y luego de una clara infracción de Marcos Rocha a Jair, Hulk lo transformó en gol y llevó justicia a un marcador que no reflejaba el desarrollo del partido.
Las condiciones estaban dadas para aumentar la cuenta y arrancó el complemento como para hacerlo. A partir de una gran jugada colectiva por la izquierda, Keno metió un pase de la muerte venenoso y, en el intento de sacar la pelota, Murilo Cerqueira terminó marcando en contra de su propia valla. Parecía el golpe de K.O. aunque Palmeiras estaba lejos de caer en la lona.
A pesar de que se avecinaba una goleada histórica, el vigente bicampeón de América terminó haciendo todos los esfuerzos posibles para empatarlo antes del pitazo final. Primero, por medio del propio Murilo, que pasó de villano a héroe a los 59′ aprovechando un rebote en un tiro libre que pegó en el travesaño. Luego, con un tanto de cabeza de Danilo que venció la humanidad del arquero Everson en el último suspiro.
Con el empate, Palmeiras corta una racha de nueve victorias seguidas en la Copa (contando 8 de este año y la final del 2021), pero alarga un monstruoso récord de 20 partidos sin conocer la derrota como visitante, marca que empezó a gestar desde la fase de grupos del 2019. Asimismo, lleva 17 encuentros consecutivos sin conocer la derrota, siendo la última derrota (de local) ante Defensa y Justicia de Argentina en el penúltimo partido de fase de grupos del año pasado. Sin duda se trata de un equipo de época en el continente.