No den por muerto al Racing Club de Costas. Aún esta vivo y nadie lo quisiera enfrentar en la fase mata mata. Todavía no llega a meterse dentro de los ocho, pero es el equipo al que todos le temen. En la zona de enfrente, la B, hacen cuentas. Cualquiera que termine primero podría ver cómo todo se derrumba si la Academia se mete sobre el final en el octavo lugar.
Para sumar chances estaba obligado a ganarle a Banfield. Ya sin margen, el equipo de Costas tenía que mostrar, de una ver por todas, el mismo nivel que lo consagra a nivel internacional. Por eso el DT puso a todos. No se guardó nada a pesar de que el jueves ya jugará a puertas cerradas contra Bucaramanga de Colombia la segunda fecha de la Copa Libertadores. Y fue goleada. Un 4-1 que no mostró tanto juego colectivo pero sí el poder ofensivo letal que tiene la Academia.
Foto: Martin Leiva
La Academia tiene al mejor 9 de la Liga Argentina y hasta del Continente. Cuando a Maravilla Martínez le llega la pelota no hay defensa que aguante. Racing puede jugar bien, mal o regular, pero si sus compañeros encuentran al delantero, casi con seguridad terminará en gol. El artillero tuvo cuatro. Todas fueron al arco y tres terminaron en gol. Sí, triplete feroz para meter miedo y avisar que la Acadé va por todo.
El primero tiempo le había sido esquivo al team de Costas. Era más que un Banfield tan verde como su camiseta. Tenía la pelota y se paraba en campo contrario, pero el último tercio no conectaba. Salas y Vietto no se imponían en el uno contra uno y la pelota no fluía con tanto velocidad. Encima, a la media hora de partido el local se quedó sin Nardoni por un problema muscular.
No pintaba tan bien la cosa para Racing. Hasta los 42’, la única chance clara había sido un remate del propio Maravilla, que de media distancia sacó un zurdazo que obligó a una fenomenal volada de Sanguinetti. Sin embargo, a falta de tres minutos una viveza puso en ventaja a la Academia.
El gol trajo alivio, confianza y más fútbol. El ST sí fue el Racing que da cátedra en Conmebol. De inicio, Salas dejó mano a mano a Maravilla tras una mala salida de Río y llegó el 2-0. Era todo blanco y celeste en Avellaneda. Un rato más tarde, centro de Martirena y otro gol del 9. Triplete, ovación.
Cuando el Racing de Costas se enfoca en el objetivo, juega con uno más. Es que, los pibes de inferiores que se encargan de abastecer los balones del partido están tan despiertos como Maravilla y Salas. «Costas nos dice que estemos atentos», cuentan. Y así, han sido protagonistas del «primer pase» en goles trascendentales: en el de Juanfer Quintero para la remontada histórica de la Academia frente a Corinthians por Copa Sudamericana, en el de Vietto a Boca y este domingo para que los de Avellaneda abrieran el marcador frente a Banfield.
Otra vez, el hombre (o el niño) de la jornada fue Lucas Álvarez, el mismo que habilitó rápido a Martirena en el gol de Luciano Vietto a Boca. En aquel momento, el uruguayo se adelantó varios metros, lo que provocó la polémica del fin de semana, y sacó largo para Solari que con una buena jugada individual dejó solo a Luciano Vietto que apenas tuvo que empujarla para superar al arquero Xeneize.
Mientras todos festejaban, Martirena volvió sobre sus pasos y chocó las palmas con el «autor intelectual» del desequilibrio académico. Lucas Álvarez juega de mediocampista por la derecha de la Séptima División de Racing.
Los tres goles de diferencia le bajaron el telón a este partido con el Taladro. Costas aprovechó que quedaba más de media hora para cuidar piernas pensando en la Libertadores. Salieron Salas y Maravilla para ganarse las ovaciones. En sus lugares, Balboa y Solari fueron por más. Rocky lo tuvo dos veces, pero le taparon un mano a mano y cabeceó desviado. Santiago tuvo una y metió el cuarto. Sobre la hora, Alaniz hizo un lindo gol de afuera del área para el descuento del visitante.
En Conferencia de Prensa, Gustavo Costas respondió a nuestro corresponsal Martin Leiva
Algunas de sus frases fueron:
¨Cuando agarre no era técnico dirigía la quinta y sexta. Tenía que hacer de todo¨
¨Fui un hombre que trata de ayudar a Racing. De Racing no me lleve un peso pero me enseño a vivir y a luchar, me hice acá en la peor época ¨
¨Estoy contento, los chicos se merecían un partido así. No nos quedaban mas balas si queríamos estar entre los ocho, solo nos quedaba ganar. Tuvieron un gran desempeño¨
¨Primero quiero entrar entre los ocho, después que me toque cualquiera. Sería lindo jugar contra Independiente, pero no podemos elegir, tenemos que ganar los partidos que nos quedan¨