A pesar que culminó el partido con cinco delanteros netos, el ‘Xeneize’ no logró quebrar al equipo de Fernando Gago y fue 0-0 en La Bombonera. Hay preocupación en Boca por la lesión de su joven figura Valentín Barco.
Se sabía que más allá de ser una serie de cuartos de final de Copa Libertadores, el Boca-Racing de esta noche también tenía antecedentes recientes muy calientes de un clásico argentino muy añejo. Así, el partido culminó 0-0 en La Bombonera y fue más tenso que emotivo, de dientes apretados y pocas pinceladas futbolísticas. Una historia que quedó abierta y sigue sin favoritos, pendiente de lo que ocurra el miércoles próximo en el Cilindro de Avellaneda.
Esta vez, el DT boquense Jorge Almirón apostó por un cambio táctico con tres defensores y los laterales Advíncula y Fabra sueltos para ganar volumen ofensivo y dominar a Racing desde el comienzo. Eso sí, se la jugó solo con Edinson Cavani en ataque junto al ‘Colo’ Barco para desequilibrar. Boca fue agresivo, con presión alta y cortando rápido la salida de Racing en su campo. Pero no lo pudo trasladar al marcador.
El tablero táctico de Boca cambió para los últimos 25′ con 3 cambios simultáneos. Pasó a tener 4 atacantes (Cavani, Merentiel, Lucas Janson y Exequiel Zeballos), en tanto Racing respondió con el ingreso Juanfer Quintero y el ‘5’ Agustín Almendra. El match entró en desorden y creció el nerviosismo, siempre con Boca más punzante. Luego Almirón quemó las naves con un 5to delantero: Darío Benedetto, pero Racing supo hacer su negocio. Habrán 90′ más, pero en Avellaneda y todo puede pasar.