Racing ganó un partido épico y quedó a uno de la cima en la Liga

La ‘Gagoneta’ perdía por 3-1 ante Rosario Central hasta los 65′, pero dio pelea y lo ganó en los descuentos por 4-3 para quedar a un punto del líder Atlético Tucumán. En el Cilindro de Avellaneda se vivió una locura interminable.

Sufrir los partidos decisivos ha sido el denominador común de los hinchas de Racing Club. Da la impresión, incluso, que siempre le debe pasar algo insólito para revivir de una noche trágica como la de hoy en el Cilindro de Avellaneda. Y es que lo del primer tiempo ante Rosario Central no tiene una explicación coherente por el 3-1 con el que se fueron al vestuario por errores propios. Pero menos la tiene esa celebración visceral cuando se consumó la gesta del 4-3 para asomar la cabeza cerca de la cima de la Liga Profesional.

Racing se adelantó con Jonás Alcaraz a los 8′, pero Ezequiel Almada (19′), Facundo Buonanotte (24′) y Alejo Véliz (34′) lo dieron vuelta en una ráfaga para el ‘Canalla’, en un primer tiempo opaco, que hacía presagiar lo peor. Fue así que la ‘Acadé’ pasó del ocaso a la gloria en los últimos 25′ de un partido que fue frenético y que, seguramente, a más de algún corazón habrá acelerado en ese tramo.

Video: ESPN

¿Pero, qué hizo Racing para cambiar rutilantemente? Metió tres cambios claves en el segundo tiempo con Emiliano Vecchio, Carlos Carbonero y Juan Cáceres, quienes le dieron esa dinámica para posicionarse en campo rival. Acaso sea el mayor potencial que encuentra la ‘Academia’ en este tramo final: el recambio de su plantel. Por ello le dio vuelta con Vecchio (65′), Maxi Romero (68′) y Aníbal Moreno a los 91′ logrando que el ‘Cilindro’ se venga abajo.

Con 40 puntos, Racing empieza la fecha 22 presionando al líder, Atlético Tucumán, que está a una unidad, y a los perseguidores Boca (39) y Huracán (37). Lo que sí está claro es que el festejo loco del equipo de Fernando Gago da cuenta de su ambición para dar pelea hasta el final. Porque supo escalar en la tabla con cuatro triunfos consecutivos. Ahora solo toca esperar y seguir soñando con ese título que parecía lejano.

Aníbal Moreno.

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