El gol de Julián Fernández en Córdoba le permite meterse entre los 4 mejores de América a la ‘V’ azulada, sitial que habían conseguido con Carlos Bianchi (1994) y Ricardo Gareca (2011). Su rival será el poderoso Flamengo.
La insinuación ya venía desde hace unos años, aunque a Vélez Sarsfield siempre le faltaba algún aspecto más para dar el paso contundente que lo devuelva a los primeros planos de la Copa Libertadores. Esta vez la historia cambió, pero fue con un sentido de pertenencia distinto. Porque más del 70% del plantel salió de las entrañas de la estructura de menores del ‘Fortín’ y porque esa propuesta intensa del uruguayo Alexander ‘Cacique’ Medina parece calzar perfecto con el ímpetu de estos ‘pibes’ que sorprenden a toda América.
Lo de esta noche en Córdoba es apenas una muestra más de un equipo solidario, sin ‘estrellitas’, y que está sostenido por tres experimentados como el defensa Leonardo Jara y la dupla ofensiva Lucas Pratto-Walter Bou. Sin embargo, el que marca la diferencia es Lucas Janson, autor de dos tantos en la ida, y que hoy dio una asistencia certera a los 80′ para el gol de Julián Fernández que silenció a los más de 57 mil espectadores en el estadio Mario Kempes.
A los jugadores de Talleres, en cambio, se les notó nerviosos por no poder vulnerar la valla de Lucas Hoyos que descolgó todo lo que le enviaron. Y más allá que los locales tuvieron algunas claras en algún pasaje de la segunda mitad -un cabezazo del colombiano Diego Valoyes por ejemplo- la ‘V’ azulada controló las acciones en los momentos claves, no con posesión, pero sí con paciencia.
Tal como ocurrió en 1994 -bajo la dirección técnica de Carlos Bianchi- año en el que llegaron a la final y hace 11 años, con la conducción de Ricardo Gareca, Vélez vuelve a las semifinales para desafiar al poderoso Flamengo de Brasil. La última semana de agosto lo recibirá en el estadio José Amalfitani seguramente con una concurrencia masiva de hinchas de un club que no es de los más populares de Argentina. Aunque sí es la institución que con menos recursos ha logrado posicionarse con una capacidad de gestión y eficiencia ejemplar, algo de lo que no muchos equipos argentinos podrían sentirse orgullosos.